Empieza mi nuevo viaje, esta vez el destino es HELSINKI, Finlandia.
Vuelo con KLM, me he pegado un buen madrugón, a las 3:35 h. ya estaba
levantada dirección al aeropuerto del Prat.
Todo iba sobre ruedas, hemos hecho el embarque puntuales y me he adormilado,
quería seguir descansando y me he perdido el pequeño revuelo que ha tenido
lugar en el avión por un retraso de 45 minutos. La mayoría de los pasajeros
enlazábamos con otro vuelo, yo hacía Barcelona – Ámsterdam – Helsinki, pero ha
sido imposible, he perdido el vuelo Ámsterdam – Helsinki.
En el avión he conocido a una mujer finlandesa que tendría que haber
viajado en el mismo vuelo que yo a Helsinki y nos hemos ayudado mutuamente.
Nos hemos dirigido al mostrador de KLM en Shipol y en menos de cinco
minutos ya teníamos en nuestras manos otra tarjeta de embarque, para tres horas
más tarde, un cheque por 10 € en comida y 5 minutos para llamar a nuestra
familia o amigos, me encanta la eficacia europea.
Al llegar al aeropuerto, por fin, de Helsinki he cogido el bus 516 (4€)
dirección la estación central de ferrocarriles Rautatientori donde me esperaba
Iina y Suman.
He tenido todos los días una temperatura entre 8 – 10º pero un frío
importante aunque si vas bien tapado se puede soportar. Aquí en invierno las
temperaturas descienden hasta -25º, todo nevado y oscuro, para mi es una
locura, inimaginable, ellos me explican que es más fácil soportar los -25º que
los -5º.
Culinariamente hablando puedo decir que he disfrutado muchísimo, he comido
un breakfast de tostadas con mantequilla, tomate, pepino y huevo, he probado un
apple pie con canela para chuparse los dedos, en un restaurante nepalí unas
bolitas de espinacas y queso, un helado de sweet milk, noodles con leche de
coco y verduras, makaroni al estilo Suman, patatas hervidas con crema de
champiñones, etc.
Helsinki es una ciudad muy bonita para visitar. Lo que hay que hacer es
comprar un ticket para los transportes, yo lo he cogido para 4 días y he pagado
17,50 €, entra el bus, tranvía y barco, pero solo metropolitano, no sirve para
ir al aeropuerto.
Hemos visitado la
Iglesia Tuomiokirkko , para acceder a ella hay que
subir una escalinata, el interior de la iglesia es muy sencilla, hay un órgano
enorme, un altar con dos ángeles a los lados, cuatro esculturas y dos lámparas
tipo araña, muy agradable.
Cruzando la plaza del senado está la Casa Sederholm
(gratis), es muy interesante de visitar, mediante dibujos y objetos hay una
exposición representando la vida cotidiana finlandesa, cuando van a pescar al
lago cuando está helado, la cena de navidad, en la iglesia, el tirineo, los
esquís, etc.
Una visita obligada es ir a la Isla de Suomelinna, “fortaleza de
Finlandia”, declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO. Hay que ir al
muelle de la salida de los ferrys locales y coger el barco que te lleba a la isla. El ticket sirve el
mismo que compré el primer día.
En la isla hay un hostal, restaurantes y viviendas. Hay un fuerte con
grandes cañones y búnquers debajo de montañitas tipo teletubbies, para defender
a la isla, en su día, de un posible ataque ruso. Des de Suomelinna disfrutas de
una hermosa vista del mar y de Helsinki. Nosotros hemos tenido aire y lluvia,
una buena combinación para parecer un helado de pitufo andante.
Al lado de la estación central de trenes se puede dar un paseo por el Parque
Töölönlahti. Los finlandeses caminan con los palos de trekking o hacen
footing alrededor del lago, donde se pueden ver patos y cisnes nadando en él,
aunque imagino que in invierno puedes patinar en el lago ya que queda
congelado, igual que el mar colindante a Helsinki.
Siguiendo con la visita hay una Escultura dedicada a Sibelius, se
llama “Passio Musicao”, era un compositor de música sinfónica. Está
ubicada en un parque con el mismo nombre que él bañado por las hojas caídas por
el otoño. Está encima de una roca, son 600 cilindros de hacer inoxidable de
distintos tamaños, grabados con láser, maybe. Es una escultura abstracta.
Cerca de la escultura está el café preferido de Iina, el Café Regata, es una pequeña casita de color rojo ubicada cerca del mar, tiene una sencilla terraza con mesas y sillas de color rojo, verde y blanca con una relajante música de fondo. Los dulces de este lugar son increíblemente buenos, puedes disfrutar en la terraza mirando el mar, con una infusión y un croissant. Es autoservicio, entras en la caseta y pides lo que deseas, tu mismo te pones el azúcar o la miel, lo colocas en una bandejita roja y vas a la mesa escogida. Al irte tienes que recoger tus cosas depositando los enseres de cristal en una cesta y los cubiertos en otra. A la entrada de la casita hay unos cuatro o cinco recipientes metálicos para ponerle agua a tu perro.
La Iglesia de Temppeliaukio está dentro de la roca excavada, es una iglesia muy moderna, con un techo de
En la calle
Uudenmaankatu nº9, hay un Bar-Restaurante que se llama Nº9,
contradictoriamente actualmente hay una exposición en la mayor parte del local
de números 8, de todas medidas, colores, materiales… la comida es muy variada y
muy buena, te puedes comer un plato de espaguetis con pomodoro y tofu por 9 €,
si quieres agua es for free por que es del grifo, es “sírvase usted mismo”, los
vasos y tres jarras, una con agua sola, la otra con rodanchas de limón y la
otra con lima están encima de la barra y te vas sirviendo conforme necesites.
Las casas, las tiendas, los locales, todos tienen doble puerta para
prevenir del frío, en algunos bloques de pisos, a fuera, tienen como unos
cepillos de púas duras que sirven para limpiar los zapatos de la nieve, las
viviendas están pintadas de color blanco neutro, me encanta porque cualquier
cosa de decoración que le pongas resalta mucho y adquiere una importancia
increíble. La luz es amarillenta. Me invade esa sensación de confortabilidad,
disfrutar de manga corta con la calefacción, saber que a fuera hace un frío
terrible pero tu estás en casa calentito colocando las luces de navidad y
viendo como empiezan a caer las primeras volvas de nieve que lo dejarán todo
cubierto durante meses, el frío, la oscuridad y la nieve estarán postrados
hasta que llegue la primavera.
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